Día 21 de Agosto Iseshi ¿o no?

Aunque es el resumen del día 21 estoy ahora en 22, ahora mismo estoy escribiendo la entrada en el tren bala, y es que de trayecto de es de unas 4 horas y ya con la entrada anterior ya se me ha pasado una hora y además volando o tendría que decir como una bala jejejeje

Bueno vamos al 21 entonces mi objetivo Iseshi, una ciudad muy importante para la religión sintoísta. Y mi otro objetivo era un Futaminoura a ver las rocas casadas. Es un monumento en la orilla del mar, en donde hay una roca muy grande y otra mas pequeña con una gran cuerda uniéndolas representa el casamiento de ambas.

Como el tren que tome iba directamente a Futaminoura y además estaba mas lejos fui directamente ahí.

Lo primero que note fue una sensación de soledad en este pueblo, y es que si en los anteriores lugares el turismo occidental era escaso convirtiéndolo en casi inexistente aquí directamente no había… bueno solo un loco con su cámara y la DS.

El camino de la estación al monumento fue de una hora aproximadamente, me recordó a lo que seria la costa brava por sus olor a mar y forma de la costa. Las casas del trayecto simplemente me encantaron, aunque no se puede comparar a la belleza de Takayama las casas me recordaron mucho a lo que seria la serie Ranma (además de ver muchas personas regando el suelo como en la serie).

Como anécdota fue que en una de las casas que pase estaban ensayando una banda, lastima no tener una cámara de video para haberlo grabado pero era una música muy motivadora.

Tras luego de llegar a la zona mas turística del pueblo por fin encontré algo de vida, y es que en todo el camino anterior tan solo me había tropezado con unos cuantos transeúntes.

La zona de las rocas se ve que también adoraban a las ranas, por que habían cientos de monumentos de estos animales por todas partes y tamaños. Aquí me propuse hace una plegaria al templo de la rana, para que no me saliera rana el viaje jajajajaja

Tras llegar a la parte de las rocas me sorprendió lo bonito que eran, las fotos eran bonitas pero nunca puede capturar la esencia por completo del lugar. Además habían unos pájaros encima de las rocas que yo estoy seguro que eran unos Pokemon legendarios: Zaptos, Moltres y Articuno. Aunque estaban un poco sucios por que solo se veían de color negro los tres jeejeje

Tras luego de pasar esa parte llegue a una cala donde baje y recogí unas conchas… mas que nada por que todo el mundo lo hacia y yo no quería ser menos. Tras eso entre a una zona que estaba un acuario y un lugar de tiendas de subeniles.

Tras todo esto me di una ultima vuelta y me proponía regresar a la estación pero pasando por un camino B y era para variar pasando una montaña

Justo antes de entrar en la senda me encontré un supermercado y compre las provisiones para comer en el recinto. Ya que el día anterior me arrepentí de no hacerlo así para comer.

Tras llegar al primer punto de descanso me comí, la rica hamburguesa de teriyaki, y una pasta que parecía un panini a lo japonés, también me compre una lata de alcohol de melocotón extra grande que a los 3 sorbos lo tuve que dejar por que me estaba subiendo demasiado y por ultimo el café con leche.

Era un ambiente muy relajante además que había un puente colgante al lado y justo en la caseta donde estaba vino un halcón (pigyoto) que comenzó a dar vueltas donde estaba y lo iba siguiendo con la sombra.

Me encantan estos momentos de soledad y es que Japón no es solo las macros ciudades, si no apreciar estos momentos insignificantes con detalle y agrado.

Con las pilas llenas me propuse pasar la montaña y es que desde que comenze este camino de la montaña deje de ver la civilización humana y el camino estaba muy abandonado así que doble motivación.

Comencé a caminar y caminar, como siempre caminaba subía para luego bajar y bajaba para luego subir. Hasta que llegue a una parte que la vegetación comenzaba a ser descomunal y por suerte cuando entre iba con la boca cerrada por que literalmente Spiderman me captura la cabeza. Tras quitarme los resto de tela de araña y escupir los restos que se me pasaron por la boca. Comencé a acelerar el paso, y venga otras ves la tela de araña. Tras la tercera ves que me paso me puse los brazos como en la defensa del boxeo y comencé a tirar para adelante sin mirar atrás. Pase por un sinfín de de telas de araña, por los pies, manos, cámara, etcs estaba lleno, por suerte no tenia ninguna araña colgada. Por que si todavía estaría corriendo.

Al final conseguí pasar toda la senda y tomar justo el tren.

Tras todo esto termine reventado y pese que Iseshima tenia ganas de visitarlo, pero no seria en esta ocasión. Así que continúe con el tren hasta Nagoya y es que me doy cuenta que cada día que pasa la duracell se me termina mas rápido.

Sobre las 4 llegue a Nagoya y pase al hotel a darme una ducha y mini siesta. Tras levantarme y estar todavía medio sonámbulo me di una vuelta por las tiendas que vi el día anterior y encontré varios lugares de culto de Otakus. En especial una tienda que tenian figuras de segunda mano y cosas usadas que son las que tanto me gustan, por que su valor es muy inferior al normal.

Tras todo esto me pase por un Big Camera que son como los Cortes Ingles de aquí, pero por su puesto con su zona para Otakus. Y es que aquí es muy normal este mundo, lo dan por televisión reportajes a Mangakas (los autores de los mangas) y temas relacionados con el mundillo. Como justamente ayer sobre las 1 de la mañana vi un programa de Cosplay World Summit de este año en donde estaba para representación de España, los que hicieron en el pasado salón el tachicoma (la amiga de la Silvia).

El caso que aquí encontré unas camisetas que estaba buscando y de mi talla además de estar un poco mas rebajadas. Pero cuando iba a pagar con tarjeta de crédito pensé en mostrar el pasaporte para identificarme y aquí comenzó mi aventura del “duty free”, y es que cuando el chico ya me estaban a punto de cobrar me dijo que acompañara a su compañero a otra planta. Tras luego de llegar ahí me pasaron con otra chica en donde me pidió el pasaporte y completo una ficha del tamaño de un periódico. Mientras tanto llamando a su encargada para preguntarle cosas (así casi 15 minutos). Cuando por fin ya parecía que terminaría me mandaron a la caja y de nuevo otro problema con la visa. Por lo que me dio a entender se puede cobrar en yenes o en euros pero según como era la comisión se lo lleva uno u otro. Opte por el aceptar, si, aceptar, si, aceptar. Al final por fin termine la compra y me hicieron un descuento de creo un 5% que significaron unos 500 yenes como mucho, con este dinero tan bien ahorrado opte para cenar un plato de tallarines en el supermercado que me los abría ganado.

Y así me pongo al día de las entradas, es increíble lo relajante que es escribir en el tren. Creo que las entradas las are aquí y luego las subiré en el hotel.

Hasta la próxima